Estas en el tee del hoyo 1, haces un par de swings de prácticas y miras la calle. Lago a la derecha y fuera de límites a la izquierda. Te colocas apuntando al centro de la calle y haces el mejor swing que puedes. Observas como la bola sale recta por donde apuntas ¡Parece que ha salido bien! Tu ilusión se esfuma al instante al ver como la bola curva violentamente hacia el lago. Una bola menos y un golpe más. Has sido víctima otra vez del SLICE.
Drive tras drive, golpe tras golpe y no terminas de saber porque ocurre el slice y mucho menos como solucionarlo de una manera satisfactoria.
El slice ocurre cuando la cabeza del palo se mueve de fuera a dentro (Flecha blanca) y la cara del palo está muy abierta con respecto a esta línea (Flecha amarilla). La bola en el caso de la foto trazaría la trayectoria de la línea roja, curvando de izquierda a derecha. El 85% de la dirección inicial de la bola lo da donde apunta la cara del palo en el impacto y la bola curva debido al camino que lleva la cabeza del palo (En este caso de fuera a dentro).
Las causas del slice pueden ser varias: puede que tu colocación no sea buena, que tu grip no esté bien puesto, que tu posición de bola no sea la adecuada, que tu subida no te permita bajar bien, que tu secuencia de bajada no sea buena o simplemente que no estés golpeando la bola en el centro del palo.
Hay muchas combinaciones que resultan en que la bola haga slice, solo tienes que recordar una cosa, la bola no te va a mentir, así que si la bola curva es porque ha ocurrido lo que te hemos descrito en este artículo. Una de las herramientas más útiles para arreglar el slice es el Radar Doppler en 3D más preciso del mundo, el FLIGHTSCOPE.
Masía Golf Academy tiene este Radar en sus instalaciones.
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